11 julio 2006

El que pregunta quiere saber (demasiado)

Que la vida debería venir con un manual de instrucciones ya se ha dicho. El hecho de que no venga podría servir de excusa sino existiera en el mundo ese abstrato concepto del sentido común.

Abstrato e ignorado cuando el tema son las preguntas. ¿Porqué a la gente le gusta tanto preguntar sobre temas que no lo corresponden y sobre los cuales directamente, deberían no decir ni pio?

- ¿Qué ha sido de x?
- Que tal con X, hace mucho que no hablas de él?
- Como vá la parejita Hace mucho que no os veo.

El hecho de que no hable y de que no viera deberían ser suficiente para que no se preguntara. Pero no lo es.

- Lo hemos dejado.
- Pero porquéeeee? (3x)

¿Como que porqué? Porqué no aparece en la carta! Porqué is not an option! Pero en lugar sencillamente de no contestar me veo escondiendo mis incofesables razones y creando una versión oficial de los hechos, que de paso, intento creerme yo también (como en Seinfeld, If you believe,its not a lie).

Porque demónios no dicen lo siento? Porque la palabra posterior ignora todo los años de educación que hemos tenido para dar lugar al marujeo? No es casualidad que se vendan tanto revistas del corazón - a la gente le gusta mucho las penas ajenas.

Es como si preguntas de que enfermedad se ha muerto la madre de alguien, o porque le han echado del trabajo. ¿Que impacto va a tener esa información en tu vida? ?Qué mas te dá?

Ninguno, claro está. Pero la gente vá a su rollo. Hablar de las vidas que no la uno propio tiene que resultarles gracioso y alentador. Al fin y al cabo, siempre está bien darse cuenta que de en vez cuando, el céspede no es más verde en el jardín del vecino.

1 comentario:

Anónimo dijo...

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