Homo Imbecilus

Una amiga siempre me dijo que gente imbecil hay en todas las partes, lo que cambia es la proporción. Yo diría en España la proporción de idiotas es bastante inferior a la de gente maja, pero porque yo me tengo que encontrar con ciertos espécimes no lo entiendo.

Y es que la falta de información y en ese caso, las deficiencias mentales de las personas a veces generan situaciones en que tu ni siquiera puedes ser mal educada porque tu oponente es demasiado tonto como para entender tu enfado.

Nada más llegar me dice que le hacía ilusión conocer a una brasileña porque éramos mucho más fogosas que las españolas. ¿Perdona? De que zoologico ha salido este pavo? Le digo que quiere decir con fogosas y me contesta que nos gusta más el sexo que a otras chicas.

Mi respuesta debería haber sido "vete a tomar por culo", pero no sólo Zapatero tiene talante:

- ¿Cuantas brasileñas conoces tu?
- Ninguna. Pero la fama la tenéis por algo.

Claro que sí. La tendremos por algo. ¿Pero que se supone que debo hacer? Renegar mi nacionalidad? Las suecas también tienen fama de liberales, los españoles de vagos, los catalanes de tacaños. Es sólo fama!

Pero no. El colega no lo entiende. Entiendo que irse a un pais donde las tías sean fáciles sea su ultima esperanza de pillar cacho: es feo, desagradable y poco culto. Pero no sabe lo ofensivo que puede ser una frase así? Vamos, con tal retórica, hasta las " comerciales del amor" seguro que se lo pensarían dos veces antes de hacerle el favor.

Aparte de decir estas chorradas de las brasileñas, también he tenido que oír que Portugal tenía que ser una provincia de España ya que es un país pobre y sin atractivo. Claro que sí! Ya les cuesta a los españoles tener a catalanes, vascos y gallegos en un mismo país, como para que encima traigan a los portugueses!

Pero hay cumplidos para todos: los alemanes son aburridos y los franceses envidian a los españoles, los judíos son mala gente y no caen bien a nadie. Un arsenal de gilipolleces antes nunca visto.

Me marché corriendo en la primera ocasión que he tenido. Sin tener claro si aquello había sido una pesadilla y un poco cabreada conmigo misma por no haberle dicho cuatro cosas.

Lo dicho: en todos los lugares hay de todo, pero un tipo como ese, baja de manera peligrosa la media de un país.