Decía el escritor alemán, Ludwig Bôrne que " No arrepentirse de nada es el principio de toda sabiduría".
La verdad es que la gente que dice que nunca se arrepiente de nada siempre me ha llamado la atención....no es que no lo les crea, es más bien porque me gustaría ser una de ellos.
Porque a ver, tiene que ser realmente cojonudo vivir la vida sin hacer nada digno de arrepentirse. Y que lo diga yo, que no sólo hago cosas de las que luego me arrepiento sino que también me avergüenzan...y mucho.
Y muchas cosas.
Y es que en los últimos meses me llevaría la palma en cualquier concurso. No de arrepentimiento, sino de cosas absurdas y "arrepentibles". Ahora pasado un rato, tengo claro que no debería haberlas hecho, que con mis actos "insanos" hice daño a un número considerable de seres humanos a parte de a mí misma y que soy la principal responsable de ellos .
Con lo cómodo que es echarle la culpa a alguién!
¿Pero de qué nos vale arrepentirse? A estas horas además... Supongo que como mínimo evitar que volvamos a meter la pata porque lo de volver en el tiempo y arreglar las cosas, no es una opción (yo volvería sin dudar y dejaría de hacer gran parte de las cosas que hice, pero para ello entiendo que tendría que convencer a más gente que se viniera conmigo y eso sí sería complicado).
Y tampoco pasa nada mirar hacia atrás y encontrar tres mil cosas que no deberías haber hecho. Jode, pero bueno las hiciste y siempre habrá los que digan que mejor haberlas hecho de que no - (RIGHT! Yo realmente no lo creo, pero al ser humano nos encanta buscarnos excusas y esa es una de las buenas).
Y nada chicos, a arrepentinos todos... además, después de todo, prefiero pensar como los italianos: equivocarse es hunmano, persistir en el error, perverso.
Y a partir de ahora no seré una persona perversa...
15 agosto 2006
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