24 octubre 2007


I misplaced your face in the shape of a smile
On a night that could never surprise me
Don't tell me you're afraid of the past
It's only the future that didn't last

Tiempos de vacaciones, de días calurosos y que pasan desapercibidos. Con la dulzura de un sobrino sonriente y aviones que rondan los tranquilos parques con pocos árboles de la zona. Hay momento y ganas para todo, para ir a Jerusalém y conocer el bello Yad Vashem y también tiempo para la playa De Ashdod y para meterse de lleno donde el Mediterraneo es todavía caliente. Tiempo para que Tel Aviv guste todavía más y para comer en los ratos libres.

Esa canción no tiene nada que ver con nada, pero es una buena compañera para estas horas. Porque si uno piensa, es una canción cojonuda con una letra que sirve y que encanta. Un post así perdido en esta mañana donde me duelen un poco la garganta y la cabeza, con letras que salen lentas y dormidas como yo misma. Pero siempre hay una cara que se te queda pegada en la memoria, una noche que no tiene porqué sorpreenderte más y un futuro que no ha durado pero también todo lo que viene y esa invitación del pasado que te ha dejado tan feliz. Son mís días de Clarice, de pensar dentro de mí y sentirme tan bien. Pronto vendrá el frío, y luego otra vez el calor. La vida es lo que pasa mientras las hojas caen por el suelo y mientras nosotros tratamos de manternos de pié y no reirnos ni llorar demasiado.