23 marzo 2011

Black, black days

Cannon fire came to call
Stood us up and watched us fall
The way we were and now outworn
Our costumes changed to uniforms
Black, black days, here to stay
On the march
Berlin to Bombers Bay
Traveling dark
On the roads to Mandalay


Me he despertado con la noticia del cohete que caía sobre Ashdod a mitad de la noche. Mi hermana me contaba como sonó la alarma y como tardó en reaccionar mientras mi cuñado sabía exactamente lo que tenía que hacer. Mis sobrinos, dormidos, llevados en brazos hasta el abrigo anti-cohete hasta que la alarma dejara de sonar. En un mundo lleno de tragedias, a alguna, a veces ponemos caras, afectos, apellidos  y me asusto cuando me toca a mí.  A mitad del día el atentado en Jerusalem dejaba poco lugar a la esperanza de que esa noche mis queridos duerman en silencio. 
Una pena - he leído un articulo en un portal brasileño donde el periodista, ya harto  de análisis complicados y más o menos acertados,  se limitaba a decir que era una pena. Estoy de acuerdo y no sólo porque en este caso los objetos de gran parte del afecto que tengo, se encuentren en peligro, sino porque también me parece muy triste que los seres humanos no encontremos en la muerte y en el dolor, razón suficiente como para hablar de paz.

20 marzo 2011


All I need is somewhere I feel the grass beneath my feet
A walk on sand, a fire I can warm my hands
My joy will be complete
No sé si lo que tengo es mucho o poco pero sé cuanto me ha costado. Miro alrededor y me pregunto como he aguantado que todo fuera distinto, que cosas tan importantes no estuvieran y de verdad  me diera igual. Fueron años largos, llenos de días de sol y lluvia y debo decir que fueron  felices porque pese a todo lo poco, el poco también tenía sabor a conquista. Empiezo el año como he terminado el anterior pero también tengo la impresión de ese empieza  en primavera y siento realmente que ese enero y febrero no han sido más que días cansandos  que han esperado hasta que llegara el sol para vestirse de nuevos.   A veces creo que me queda demasiado por recorrer  y solo tengo ganas de  un poco más de paz, de llegar a la meta imaginaria y como en las carreras largas,  llegar al final y disfrutar del logro y del hecho de que ahora, toque descansar.