07 noviembre 2007

La oscuridad de la noche


Una mañana sin calls, sin reuniones sin “nada” que hacer excepto bucear por mi correo y dedicarme un ratito a mi blog, a pensar, a tener ideas raras. Cada vez más me doy cuenta de que necesito tiempo solo para mi, un tiempo vacío y muerto donde yo decida sin intervención de nadie que quiero hacer con él.
Llevo unos días tan llenos que me da muy poco tiempo para pensar… cerca de mí hay relaciones que empiezan, otras que acaban y yo no dejo de preguntarme si tanto dolor o felicidad son realmente necesarios. Parece ser que sí, que estamos aquí para eso, para probar, experimentar, arriesgarnos y alguna que otra vez rompernos el corazón.
Pero a día de hoy me siento tan bien, tan lejos que las ganas me tienen completamente confundida: quieres pero realmente lo necesitas? Es algo importante o sólo quieres pasar el rato? Salir de caza? Quedarse, irse, construir una familia, plantar un árbol? Que haremos ahora que podemos todos elegir? Ser libre también es una obligación, habrá que ejercer la libertad de no ejercer nada y sólo contemplar las mañanas frías. Ayer era mucho y hoy es tan poquito. Hablamos de afectos de pacotilla, de querer mucho y desde hace más tiempo y quedarse en el invierno porque nunca se sabe que tiempo hará en la primavera. Hablamos de no entender y de esperar a que llegue algo que no necesite explicación. De buscarla y de no dejar que pase como un desfile de carnaval. Son días tranquilos porque son llenos de cosas. Llenos de respuestas que llegan en silencio y de dudas sobre donde te llevará el viento. Nada de eso importa porque ya he decidido, así como Clarice Lispector, que no tengo miedo de lluvias, tempestades, ni de rajas de viento sueltas, porque yo también soy la oscuridad de la noche.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Eres verdaderamente la oscuridad de la noche ?
Has leido eso ?
http://tomas13.blog.kataweb.it/2007/11/06/la-nuit-selene/
^__^